9.11.10

Gimena Ki Chan: Una propuesta creativa de recuperación del mundo infantil.


“Las personas mayores me aconsejaron abandonar el dibujo de serpientes boas, ya fueran abiertas o cerradas, y poner más interés en la geografía, la historia, el cálculo y la gramática. De esta manera a la edad de seis años abandoné una magnífica carrera de pintor. [...]. Las personas mayores nunca pueden comprender algo por sí solas y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones.”


Antoine de Saint- Exupéry, El Principito, 1942




En la obra cumbre de Saint- Exupéry El Principito aparece una revalorización de las cosas que importan en el mundo infantil y que se van perdiendo al pasar de los años. El principito recibe un secreto de la serpiente: “lo esencial es invisible para los ojos”. En este relato se recupera la importancia de la vida y belleza de una flor así como la relevancia de la amistad y las relaciones humanas. Tanto en el texto como en las ilustraciones, hechas por el propio Saint- Exupéry, existe una referencia nostálgica por el mundo infantil y sus valores. Resulta poco frecuente encontrar a “personas mayores” que entiendan y compartan los valores del mundo infantil, sin embargo existen ejemplos relevantes, como la propuesta estética de la artista Gimena Ki Chan.



Ki Chan propone una estética infantil que demuestra, como las ilustraciones de El Principito, una melancolía por la pérdida de la infancia. En sus obras, que abarcan varios géneros, como pintura, dibujo, instalación y objetos logra la creación de un mundo paralelo, en donde la fantasía tiene cabida. A partir de la aplicación de una gama cromática de colores claros -predominando los rosas, verdes, beige y blancos contrastados con negro- la artista crea ambientaciones en donde la ternura domina el espacio.




La obra de Ki Chan recupera influencias estéticas de diversa índole; acervos populares de la cultura urbana, como caricaturas y manga japonés; tradiciones ancestrales vinculadas con prácticas zen, como el origami; así como la ilustración de libros para niños. Con dichas influencias la artista genera un estilo personal con una excelente técnica en donde conserva un halo de misticismo, así parece que existe algo detrás del misticismo de las piezas en las que, como para el principito, lo esencial es invisible para los ojos.





Josefa Ortega, Noviembre 2010.

3 comentarios:

  1. Wuau, me gusto la obra de Gimena, es una propuesta de expresión delicada y elegante con un toque naive, sin embargo esta fundamentada en imágenes positivas que reclaman la libertad creativa de los niños, muy al contrario del post anterior, en donde Yoshimoto Nara, ofrece una propuesta negativa de reacción ante el abuso del poder de los adultos hacia los niños.

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  2. Great post, keep up the good work!

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  3. Estaos cuadros no son màs que sombras del pasado..pero contienen particularidades bellas,y si a la vez que que son elegantes y contemporaneos..invocan un mundo de alegrìa!!

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